La beatificación de la religiosa caraqueña, será una oportunidad para la “renovación” de todo el país “en estos momentos tan difíciles”, dice el secretario de Estado del Vaticano

“Nosotros como cristianos tenemos una propuesta de vida nueva que es exactamente la santidad, y que significa amar con todo el corazón y con todas las fuerzas a Dios y a nuestros hermanos. Esto es lo que han hecho la Madre Carmen Rendiles y todos los santos en la historia de la Iglesia”. Así lo dice el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, en un video mensaje dirigido a los venezolanos, con motivo de la beatificación de la Madre Carmen Rendiles Martínez.

La ceremonia está prevista para el próximo 16 de junio, en el estadio de béisbol de la UCV, en Caracas, a partir de las 10 de la mañana. El cardenal Ángelo Amato, prefecto de la congregación para la causa de los santos, y enviado especial del Papa Francisco, será el encargado de presidir los actos de beatificación.

El mensaje fue presentado en una reunión de la comisión organizadora de la beatificación encabezada por el cardenal Jorge Urosa Savino, quien destacó la importancia del mismo. “El cardenal Parolin es el segundo hombre al mando de la Iglesia; ha sido nuncio en Venezuela entre 2019 y 2013; y los venezolanos en general y la iglesia en particular, siempre hemos contado con su invalorable aprecio”.

Rosa María Ríos, una religiosa de las Siervas de Jesús y vice postuladora de la causa de Madre Carmen Rendiles fundadora de esta congregación, dio a conocer el video mensaje, realizado durante una visita a la Santa Sede, adonde acudió para precisar los detalles de la ceremonia a partir de la cual Venezuela contará con su tercera beata.

Carmen Rendiles, ejemplo de santidad

“Pienso que es un momento de gracia para uno de ustedes y para toda la nación”, sostiene el secretario de Estado del Vaticano en el mensaje. “Espero que haya una participación muy grande en el rito de beatificación (…) y que sea una ocasión para la renovación de las Hermanas Siervas de Jesús que son las hijas de Madre Carmen”.

Según expresó el cardenal Parolin, la ceremonia de beatificación de la religiosa que nació en Caracas, el 11 de agosto de 1903, es una motivación para “vivir sus enseñanzas, su ejemplo y el carisma” que ella ha dejado a la iglesia en la congregación.

“Una renovación también para toda la iglesia y la misma sociedad venezolana en estos momentos tan difíciles”, agregó. “Que su ejemplo de santidad, ahora reconocido por la Iglesia, pueda ayudar a todos los venezolanos a renovarse en este sentido”. Concluyó asegurando sus oraciones por Venezuela. “Estaré espiritualmente presente en este rito de la beatificación. Que Dios los bendiga a todos”.