El pasado 19 de diciembre el Papa Francisco firmó el decreto que aprobó la beatificación de la Madre Carmen Rendiles, luego de que la Santa Sede estudiara y validara la curación milagrosa “instantánea, perfecta, estable y duradera”, ocurrida en la doctora Trinette Durán de Branger, el 18 de julio de 2003.

Madre Carmen es reconocida por la iglesia católica como una venezolana luchadora, con voluntad férrea y profunda fe cristiana. Su testimonio de vida enseña que no hay obstáculo que no se pueda vencer con la gracia de Dios. “Sus hermanas religiosas y quienes compartieron con ella en vida, la recuerdan como una madre espiritual, con disposición amorosa y entrega incansable a la labor apostólica y a la adoración de Jesús Hostia”, comentó la hermana Rosa María Ríos miembro de la congregación de las Siervas de Jesús y vicepostuladora de la causa de santidad de la Madre Carmen.

Tras conocerse la noticia de la pronta beatificación de la Madre Carmen, la Conferencia Episcopal de Venezuela y sus hermanas de la congregación Siervas de Jesús, transmitieron la alegría y el entusiasmo por la nueva beata venezolana. La hermana María Eugenia Noreña, superiora general de la Congregación de las Siervas de Jesús aseguró que Madre Carmen es un ejemplo de fe para todos los cristianos porque “siguió a Dios con fidelidad, dejando todo en sus manos, pensando solo en amarlo, en extender, profundizar y difundir la piedad eucarística en medio del pueblo de Dios”.

Con la aprobación del Papa Francisco, la Madre Carmen se elevará a los altares como la tercera beata de Venezuela y la primera perteneciente a la feligresía caraqueña, que celebra con júbilo y abraza el mensaje de esperanza y unión inspirado por las virtudes heroicas de una venezolana que entregó su vida al servicio del prójimo.

La ceremonia de beatificación se llevará a cabo el próximo sábado 16 de junio en Caracas y será una hermosa oportunidad para reunir a todo el pueblo venezolano en torno a una celebración que busca avivar el sentimiento religioso y, comunicar esperanza y unión en medio del difícil momento que atraviesa Venezuela. Para el acto solemne se espera la presencia de representantes del Vaticano que traerán al país el mensaje de fe, compasión y fortaleza cristiana del Papa Francisco.